![](https://static.wixstatic.com/media/ce4672_59729b565be74d74be0117324d4b8a70~mv2.jpg/v1/fill/w_720,h_899,al_c,q_85,enc_auto/ce4672_59729b565be74d74be0117324d4b8a70~mv2.jpg)
Ayer, bien entrada la noche y a punto de cerrar el primer día del nuevo año, la Luna Llena en el signo de Cáncer se opuso en alineación exacta al Sol en Capricornio. Momento de enorme intensidad energética y emocional.
La Luna rige nuestras emociones así como gobierna el ir y venir de las mareas. Es mentora de nuestros ritmos cíclicos y simboliza nuestra fecundidad.
En Cáncer (signo de quién es regente) la Luna Llena se exalta y nos propone un mirar ineludible. Que mirar? Todo aquello que tenga que ver con como cuidamos de nosotros mismos. Como somos capaces de protegernos cuando es menester hacerlo. Cáncer es el primer signo de agua del Zodiaco y su don es sin duda donarse, darse, entregarse a aquello que necesita ser protegido y luego retirarse cuando aquello que protegió yo no la necesita. Es así vibración de alto altruismo. Cáncer es la sabiduría que el cuerpo materno expresa durante la lactancia. El cuerpo de la madre detecta por contacto aquello que su cría necesita. Así día a día provee lo que es necesario. Minuto a minuto muta y cambia guiada por el tacto, el abrazo, el profundo y certero contacto piel a piel. Así jamás confunde necesidad con hábito, nunca da lo mismo, porque lo dio eficazmente el día anterior. Imaginemos por un instante si pusiéramos la cabeza a comandar este asunto... Haríamos un desastre verdad? Bien esto es energía canceriana de alta vibración. De esto hablamos cuando hablamos de necesidades. Nosotros los, adultos, confundimos todo el tiempo necesidad y habito, así repetimos hasta el mismísimo dolor conductas que creemos nos traen resguardo y reparo. Sin hablar de aquellos patrones vinculares que seguimos sosteniendo y no nos son nutricios. Cuanto postergamos el contacto concreto con nosotros y con los otros y lo disfrazamos de satisfacciones momentáneas y anestesiadas? Abrazamos? Somos conscientes de nuestras necesidad del amoroso estrecharnos? Nos alimentamos con amor o somos bocas abiertas que no registramos lo que ingerimos? La comida es una exigencia mecánica con la cual cumplir o un momento de hacer contacto con nuestro cuerpo fuente de sabiduría e intuición?
Aunque el año inicia esta Luna marca un momento final que comenzó el junio de este año con La Luna Nueva en el signo. Es un excelente tiempo para despedir patrones viejos de relaciones con nuestro árbol femenino. Madres, abuelas, hijas, nietas. Es portal de sanación. Que formas ancestrales de relacionarnos con lo materno venimos repitiendo? Aquello que es tóxico, aquello que nos drena pide soltarse. Cuantos viejos pactos aún sostenemos?
Nos animamos a ver, soltar, agradecer y seguir?
Seamos amorosos que todos los que nos anteceden están allí poniendo su energía para que nosotros hagamos un movimiento de evolución y deliberación. No es excluyendo ni rechazando. Es mirando, poniendo luz de comprensión, aceptando y trasmutando. Lentos pero seguros.
Es momento, la potente energía de Capricornio es mucho más que el Sol ayudando a poner luz y consciencia. Saturno esta acerca propiciando movimientos pausados pero concretos. Plutón escolta e invita a profundizar en miedos con el único objetivo de transformar, de dejar morir lo que ya no nutre y liberarnos a lo nuevo.
Cierto repliegue se necesita. Percibirnos, cuidarnos, ser consientes de aquello que sucede puertas adentro pareciera solo se logra con momentos de silenciosa introspección. Es tiempo para no desoírnos.
Para alcanzar nuestro propósito, debemos primero reconocer y nutrir nuestras raíces. Honrémoslas. Acerquémonoslos a quienes de verdad necesitamos. Cuanto más profundo y consiente sea nuestro viaje interno, cuanto más estemos dispuestos a bajar, más robusto y vital será nuestro elevado crecimiento. Base solida se necesita, y este es el momento para fortificarla.
Hoy Urano Dios del Rayo, símbolo de cambios radicales, arranca su camino directo por Aries. Nos invita a dar el paso a accionar en pro del cambio. Valentía se necesita.
Bienvenidos a tiempos de mirar conscientes viejas emociones. De elegir nutrirnos con amor y paciencia. Que cuanto más tolerantes y piadosos seamos, cuanto más nos abrasemos y abrasemos a aquellos que queremos, más fuerte y altos creceremos. Tenemos infinitas sabiduría cósmica para entregar. Somos dadores por naturaleza. Que así sea para todos!